¡Un nuevo integrante ha llegado a la familia! Estamos seguros de que el amor que sientes por tu bebé no se parece al que hayas sentido por alguna otra persona. Por esta razón, traemos para ti 5 elementos que siempre debes considerar tener en la habitación de tu bebé, tanto por practicidad como por seguridad:

 

Una cuna adaptable para sus etapas de crecimiento

 

Aunque tener una cuna parece un punto muy obvio, debes tomar en cuenta que existen modelos que son para determinados meses, y posteriormente quizá ya no serán funcionales al 100% para el desarrollo de tu bebé.

Por ello, procura encontrar una cuna que pueda ser útil durante los primeros años de vida de tus hijos, de esta manera podrás estar seguro de haber hecho una inversión inteligente.

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Cortinas o persianas especialmente diseñadas para el cuarto de tu bebé

 

Tu angelito comienza a despertar su curiosidad por el mundo que lo rodea, y si bien es cierto que es importante que sus cortinas o persianas tengan una apariencia armónica con la habitación, también debes asegurarte de que permitan una correcta iluminación natural por el día y que eviten la entrada excesiva de luces exteriores por la noche.

Para tal caso, te recomendamos considerar nuestras Persianas Blackout, ya que resultan ideales para controlar la luminosidad y la privacidad en la nueva habitación de tu bebé.

 

 

Monitor

 

Ya sea uno de tipo walky talky, o uno más avanzado que te permita grabar en video y en tiempo real, este elemento nunca puede faltar en la habitación de tu pequeño retoño.

Es uno de los elementos de seguridad que más te ayudará: si el bebé se despierta de su siesta, si deseas ver en qué posición se encuentra durmiendo en caso de que tenga reflujo, o simplemente si deseas echarle un vistazo, este tipo de monitores serán tus mejores aliados.

 

Un sillón de lactancia

 

No hay nada más hermoso que alimentar a tu bebé ¿Verdad? Y por tal motivo, tener un sillón especial para esta tarea debe ser una prioridad.

Toma en cuenta que tu comodidad es directamente proporcional a la correcta alimentación de tu pequeñín, por tanto, procura hacer un esfuerzo por tener un sillón de lactancia durante los primeros dos años de tu bebé.

 

Un cambiador

 

Sabemos que cambiar pañales nunca será una tarea sencilla, por el contrario, es una actividad que involucra diferentes grados de dificultad considerando la posición de tu bebé, las comidas que ha tenido, los materiales con los que cuentas para auxiliarte (toallitas y talco, más pañales), o incluso el espacio mismo.

Por eso, no dudes en invertir en un buen cambiador que se adecué al 100% a tus necesidades y las de tu peque, ten por seguro que lo agradecerás.

 

 

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